lunes, 28 de octubre de 2013

FORJANDO ESPADAS


Barranquilla, 28 de octubre de 2013.


En estos días viendo unos capítulos de una serie, mostraron a alguien que forjaba una espada especial.  El proceso era con piedra y fuego, y la estuvo forjando hasta quedar en el punto especialmente perfecto, con el filo y la firmeza que deseaba; pues era una espada muy especial.

Así mismo, cuando nosotros estamos pasando por procesos (cualquiera que sea) muy probablemente no alcanzamos a imaginar que de ahí saldrá algo bueno, que de eso tan obscuro pueda surgir algo que de luz; Pero lo bonito de la respuesta es que es un SÍ, ¡Sí saldrá algo bueno!, ¡Sí vemos luz!  y de pronto al leer esto pienses "decirlo es muy fácil"; pues yo no sólo lo digo, yo lo vivo, y creo que eso hace la diferencia aún ante grandes catedráticos que sólo tienen conceptos. Y es que precisamente cuando somos forjados en Dios, podemos entender que se trata de medios para llegar a un fin, y que para los que le amamos todas las cosas nos ayudan a bien.

Finalmente, cada aprendizaje nos hace crecer, y a medida que nos cedemos a Jesús cada situación en nuestras vidas nos forja y nos vuelve más útiles, como esas espadas especiales en las manos del Rey.